Hay muchas razones por las cuales una mujer no puede llegar a quedar embarazada, algunas de esas razones se deben a tratamientos sumamente agresivos que restringen por completo la capacidad de una mujer para ser madre.
Sin embargo, los avances en la ciencia de la fertilidad han logrado en los últimos años, tratamientos que en otros tiempos hubieran parecido irracionales.
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El caso de Moaza Al Matrooshi
Ese fue el caso de Moaza Al Matrooshi, una mujer de 24 años de edad, que en su infancia sus padres tomaron una decisión que ha hecho la diferencia entre para ella entre poder ser madre o no.
Moaza Al Matrooshi a la edad de 9 años tuvo que ser sometida a quimioterapias y un trasplante de medula ósea debido a que nació con Beta Talasemia.
Lo que ocurre a una persona con beta talasemia es que los glóbulos rojos, que tienen un tiempo de vida de 4 meses, se destruyen a una velocidad mucho mayor haciendo que la persona sufra anemia, una afección que causa cansancio y otras complicaciones.
En el caso de Moaza, sus padres tomaron la decisión de que el ovario derecho de su hija fuera removido y congelado antes de que fuera sometida a las quimioterapias, pues ellos estaban preocupados de que el tratamiento dañara sus ovarios y ella quedara estéril.
Así fue como en 2001, cuando ella tenía 9 años, optaron por someter a criopreservación el tejido ovárico de Moaza, este procedimiento fue llevado a cabo en la Universidad de Leeds En el Reino Unido.¿Y cuál fue el resultado? Pues una decisión bastante acertada pues gracias a ella Moaza ahora es madre a sus 24 años.
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El procedimiento
El Dr. Zain Al-Safi, especialista en fertilidad del Centro de Fertilidad y Salud Reproductiva de UCLA, describió este procedimiento a la revista Healthline, «Se reciben los ovarios antes de la exposición a la quimioterapia o la radiación. Cuando el paciente ya se encuentra estable y es capaz de quedar embarazada – en consulta con su oncólogo – los cirujanos trasfieren los ovarios de nuevo a su cuerpo para que pueda lograr el embarazo»
Así fue como en 2014, Al Matrooshi estaba lista para ser madre, por lo cual los médicos en Dinamarca trasplantaron su tejido ovárico de nuevo a su cuerpo, cuatro piezas fueron unidas a su ovario izquierdo y una al lado de su útero.
3 meses después del procedimiento, sus niveles hormonales volvieron a la normalidad. Para aumentar las posibilidades de que pudiera concebir un bebé, los médicos utilizaron la fecundación in vitro (FIV) para producir tres embriones, con lo cual implantaron dos de ellos en su útero a principios del año pasado (2016) y así fue como pudo tener un bebé sano en el Hospital de Londres para Mujeres y Niños de Londres en diciembre pasado (2016)
Lo que es mejor, Al Matrooshi todavía conserva un embrión en el almacenaje para cuando quiera tener otro bebé.
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Este y otros métodos para revertir la infertilidad todavía son experimentales
Aunque el primer bebé nacido de tejido ovárico criopreservadofue entregado en 2004 en Bélgica, Al Matrooshi es la primera mujer (que se conoce) que fue madre gracias a que su tejido ovárico fue congelado mucho antes de que alcanzara la pubertad.
Sin embargo, este método todavía es considerado experimental. Con todo y eso miles de mujeres han depositado su tejido ovárico a criopreservación con la esperanza de lograr un embarazo más adelante en sus vidas, según ha informado el Chicago Tribune.
Aunque otros métodos estándar están disponibles para las mujeres con el fin de preservar su fertilidad – incluyendo la congelación de los huevos o embriones, muchos de esos procedimientos no son adecuados para todas las mujeres, ya que requieren el uso de hormonas para estimular los ovarios con el fin de obtener los huevos, pero esto tiene sus límites.
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Otros tratamientos
Aparte de la criopreservación de tejidos ováricos como la congelación de huevos también hay otra serie de tratamientos de fertilidad.
Otro tratamiento de fertilidad que se está explorando es la maduración in vitro (IVM). Este método experimental proporcionaría una alternativa a la (FIV)Fecundación in vitro
Con la FIV, los ovarios son estimulados usando hormonas para obtener huevos maduros, los que están listos para ser fertilizados por un espermatozoide, mientras que la Maduración in vitro (IVM) permite a los médicos obtener óvulos inmaduros del ovario y madurarlos en el laboratorio. Aun así, las tasas de embarazo con la maduración in vitro han sido más bajas que con la fecundación in vitro.
Otro tipo de tratamiento en el que han estado trabajando los médicos para que las mujeres puedan quedar embarazadas y dar a luz tiene que ver con el trasplante de útero.
Con este tipo de procedimiento en 2014, una mujer en Suecia fue capaz de dar a luz a un bebé sano. Sin embargo, una segunda cirugía de este tipo fue llevada a cabo en la clínica Cleveland, siendo el primero de este tipo en USA, pero falló debido a una infección.
Los médicos siguen haciendo estudios y experimentos en búsqueda de soluciones para tratar la infertilidad femenina, así que las esperanzas de ser madres para muchas mujeres están en aumento.
