Tener un piercing en el ombligo es algo que se pone cada vez más de moda, pues hace lucir el abdomen más sensual y coqueto. No obstante, algunas mujeres se preguntan si es seguro usarlo durante el embarazo y a continuación te decimos lo que debes saber al respecto.
La gestación supone muchos cambios en el cuerpo, especialmente en la zona del abdomen, pues el vientre se expande para permitir el desarrollo del bebé.
Por ello, es importante tomar algunas precauciones en caso de tener un piercing en el ombligo durante el embarazo.
Piercing en el ombligo durante el embarazo
¿Puedo llevar un piercing en el ombligo durante el embarazo? Es una pregunta común entre las mujeres que usan este accesorio y la respuesta dependerá de la decisión que tomes una vez que sepas los posibles riesgos que pueden surgir.
El piercing no representa un peligro para el bebé que está en le vientre, sin embargo, a medida que va creciendo el abdomen, puede ser causa de múltiples molestias y complicaciones.
Es posible que origine una rotura o desgarro en la piel de la zona debido a la tensión, lo que causaría una herida que debe atenderse correctamente porque tiene potencial de infectarse rápidamente.
Cuidados de un piercing en el embarazo
Evitar las complicaciones causadas por el piercing en el embarazo solo requiere de quitarse el accesorio del ombligo al menos durante esos nueve meses. Después puede volverse a colocar sin ningún problema.
Si decides dejarlo para evitar que la perforación se cierre, debes ser muy disciplinada con la higiene, lavando la zona todos los días y estando muy al pendiente de cambios que indiquen una posible infección.
Los síntomas de que un piercing en el ombligo está infectado incluyen inflamación, cambios de color, supuración de líquidos y dolor local.
Estas molestias indican un problema causado por una mala higiene de la zona o por el rechazo del cuerpo causado por la distensión abdominal del embarazo.
Se recomienda usar ropa holgada que no roce la zona del ombligo para evitar lesiones por irritación. Si surgen estrías, será mejor quitar el piercing para evitar cicatrices profundas.
La realidad es que hay pieles más sensibles que otras, por lo que es probable que algunas mujeres puedan usar un piercing en el embarazo sin problemas, mientras que, en otras, surjan complicaciones importantes.
¿Puedo ponerme un piercing durante el embarazo?
Lo mejor es realizarse la perforación al menos cuatro semanas antes del embarazo, para que pueda cicatrizar antes de que la piel se estire mucho.
Ponerse un piercing durante el embarazo sí tiene riesgos para el bebé, pues es posible contraer enfermedades si se hace en lugares con poca higiene o desarrollar infecciones en el proceso de cicatrización.
Por otra parte, el piercing en el embarazo no se aconseja cuando se tiene programado un parto por cesárea, ya que igual será necesario retirarlo antes de la cirugía. La recomendación es esperar hasta después del parto para hacerlo o si ya se tiene, quitarlo durante todo el embarazo.
Tener un piercing en el ombligo durante el embarazo requiere de cuidados especiales, así que valora todas las ventajas y desventajas antes de decidir usarlo en esta etapa.
