Aquí en Todos Somos Uno, dentro de la sección de Amor y Paz, continuaremos platicando sobre el Reiki y sus beneficios, para todos aquellos navegantes que quieran practicar esta terapia de sanación, vivimos en un universo cuya expresión es la energía, compuesta por la luz e información.
Esa unidad primaria es la energía que se manifiesta a sí misma en una diversidad infinita de formas. Todo aquello que existe constituye la expresión de la misma unidad.
Percibimos esta realidad a través de nuestros sentidos; sin embargo, ellos sólo registran el 10% de la materia existente, quedando por descubrir un inmenso porcentaje de lo real que no vemos, no oímos, no sentimos al tacto, no olemos, ni gustamos. Dentro de este porcentaje se ubica aquello que se denomina “inteligencia infinita”. La palabra Reiki no es más que una de las tantas formas de nombrar la energía que las diferentes civilizaciones utilizaron a lo largo de la historia de la humanidad.
La capacidad de transmitir el Reiki se adquiere del maestro y es precisamente esta enseñanza la que hace la diferencia sobre el resto de los métodos de tratamiento holístico y energético. Se le llama “Entonamiento” a la transmisión de conocimientos del maestro al alumno que le transfiere la capacidad de ser un canal para las energías universales.
De ahí que la capacidad de curar con el Reiki se reciba de una forma tan rápida y duradera, ya que desde el momento en que se recibe la capacidad a través de la entonación, nunca se pierde. De hecho si esta persona ya no quiere continuar con el método, lo puede delegar, sin perder su capacidad, incluso hay pruebas que confirman que pueden pasar hasta veinte años sin ejercerlo y nunca perderán el “Don”, por llamarlo de alguna manera.
Y es que en verdad sucede con el Reiki, es que nosotros sólo somos los canales por donde pasa la energía curativa, esa energía que se encuentra en todos lados, y solo nos tenemos que ligar a ella para dejarla hacer su función sanadora.
Desde el momento en que la persona recibe del maestro la capacidad de sanar, ésta estará con ella para siempre. Ahora bien, por supuesto la capacidad de sanar se vuelve más fuerte y efectiva si se practica a menudo el Reiki.
Referencia: Sencilla Guía del Reiki – Editorial Época.
