En Toluca, con base en datos aportados por la médico Yuridia García perteneciente a la Universidad Autónoma del Estado de México, existen aproximadamente 200 niños con el Trastorno del Espectro Autista, situación que escasamente es considerada por los citadinos, ya que una de las formas de celebración de Navidad y Año Nuevo se concentra en el uso de pirotecnia, la cual expresa alegría y emoción para la mayoría de la población, no obstante, indica que podría incluso producir dolores físicos en los pacientes, además de inquietud, miedo, nerviosismo, ansiedad, estrés y hacerles perder el control de sus movimientos.
Aseveró que entre mayor sea el estrés del paciente, mayor posibilidad existe de que pueda producirse daño a él mismo, lo que es difícil de controlar por los padres o personas cercanas al paciente.
“Poca gente sabe que los autistas tienden a lastimarse a ellos mismos si se encuentran en una situación de peligro, hay quienes llegan a golpearse, rasguñarse y morderse, este tipo de cuestiones son complejas para quienes cuidan del paciente, ya que una vez que el niño o el adulto entre en una fase de estrés, detenerlos llevará minutos, horas o incluso hasta que entre en estado de sueño”, dijo.
Recomendaciones para pacientes TEA
Ante ello, sugirió el uso de tapones en los oídos, así como auriculares o audífonos que les impidan percibir un cien por ciento del ruido exterior, evitar salir en horas en las que existan mayores aglomeraciones, vestir al paciente con ropa ajustada, lo cual permite una presión del cuerpo y auspicie a tener un control de estrés y preparar al niño antes de las celebraciones para que trabaje en el control de sus emociones. Asimismo, mencionó importante respetar las decisiones que puedan ser tomadas por los pacientes, entre las que incluyen no asistir a reuniones o salir a celebrar.
“No hay que dejar de lado a grupos sociales tan sensibles, pues también forman parte como cualquiera de nosotros de la población, antes de pensar en pirotecnia, hay que reflexionar sobre el daño que podemos causar no solo a los pacientes de los que hablamos o cualquier otro paciente con algún trastorno, sino también por cuidado al medio ambiente y a animales”, mencionó.
