En los últimos dos años se ha tenido la posibilidad de usar un equipo de cómputo fuera de la oficina.
El trabajo en casa es una práctica que ha crecido en ese tiempo y tiene grandes ventajas y beneficios. Gracias a esta, se han quitado barreras geográficas, de horarios, y costos que pueden incrementar la productividad del trabajo.
Siendo que esta es una práctica que cada vez se busca con más frecuencia, hay algunos consejos que se pueden seguir para tener una mejor experiencia de trabajo en casa. https://d-13270083233522145063.ampproject.net/2112032204000/frame.html
1. Crear un espacio propio de trabajo
Es importante buscar en casa el mejor espacio para trabajar. Si se tiene un cuarto especial que se pueda usar para ese propósito, será muy fácil encontrarlo y hacerlo propio, incluso instalar una de las mejores computadoras de escritorio y tener ya una estación de trabajo. Sin embargo, muchas veces se comparte la casa con familia u otras personas por lo que no se tiene el espacio. Aún así, es importante crear uno en donde sea más conveniente y que esté acomodado al gusto mientras se use para trabajo.
Si únicamente se tiene una mesa donde se pueda acomodar el espacio de trabajo, pero también debe usarse para comer u otras funciones, durante cada una de ellas debe verse de diferente manera para que se sienta como un lugar especial.
Lo ideal es darse una vuelta por una tienda de computadoras para adquirir todo lo necesario.
2. Respetar el horario de oficina
Muchos trabajos remotos no tienen horario como tal, sin embargo, es importante crearse un horario de trabajo. En el caso de tener un horario estricto, se debe seguir y hacerse una rutina que se pueda seguir de acuerdo al mismo.
Principalmente, un horario de inicio y fin, así como uno para la comida. Este consejo puede aplicarse, aunque no se tenga un horario fijo. Si se crea una rutina, se le puede dar el uso adecuado a cada espacio, sobre todo si no se tiene mucho espacio en casa. Igualmente se recomienda no empezar justo al levantarse, ya que no se haría en una situación en la que se va físicamente a la oficina.
3. Tratar el espacio asignado y el horario como si fuera la oficina
En este mismo sentido, ya teniendo un espacio y un horario, ese tiempo se debe utilizar como si se estuviera en la oficina. A partir del inicio del horario asignado hasta su fin, se debe de tratar de concentrarse en las tareas a realizar, sin distracciones que no se harían en la oficina, como la televisión, juegos de video, o realizar tareas de la casa.
4. Asignarse metas diarias y prioridades
En cuanto al trabajo en sí, es importante asignarse metas y prioridades. Muchas veces es una tarea que se hace siempre, sin embargo, estando en casa es crucial tener claro qué es lo que se realizará para poder hacerlo rápido y sin distracciones. Es común que estando en casa se quieran realizar otras actividades, y de esta manera se puede optimizar el tiempo.
5. Mantener la comunicación con el equipo de trabajo
Al no estar físicamente con el equipo de trabajo o superiores, se debe buscar activamente mantener la comunicación con ellos y ellas para no perder confianza y relaciones laborales. Cada persona se encuentra en su propio espacio y se debe tratar de mantener conectada para tener una mayor productividad.
6. Buscar descansos
Puede ser muy monótono estar muchas horas frente al equipo de cómputo.
Aunque se tengan horarios específicos y se deba tratar como si fuera la oficina, es importante despejar la mente, cambiar un poco aire e hidratarse. Los descansos son la perfecta oportunidad para fomentar la creatividad.
