Resistencia al cambio

En esta ocasión en Todos Somos Uno, platicaremos sobre la resistencia al cambio que casi todos tenemos ante lo nuevo o ante conductas que tenemos que modificar por nuestro propio bien, ya sea un trabajo nuevo, una nueva escuela, una dieta, una recomendación médica, un nuevo modo de trabajar, de estudiar, todo lo que sea diferente a lo que ya tenemos por costumbre hacer y que modifica nuestra rutina, por ende nuestro grado de confort.

 

Sea cual sea la conducta que deseemos modificar, encontraremos una resistencia para lograrlo. Ya que no siempre es fácil cambiar nuestros patrones de vida. Esto no significa que debamos cesar en nuestros intentos por mejorar y sacudirnos el patrón que se ha convertido en un problema para nosotros, dejándonos llevar por la inercia esperando que se resuelva por sí mismo.

 

Seguramente te ha ocurrido que, cuando decides abandonar el hábito del cigarro, aparecen por doquier numerosas invitaciones a fiestas y reuniones donde todos están dispuestos a ofrecerte un cigarrillo. O aquellos que han decidido ponerse a dieta y resulta que lo hacen precisamente en Diciembre justo antes de las fiestas o en fechas en que su agenda está llena de invitaciones a fiestas y cumpleaños, por lo que se ven obligados a posponer este cambio.

 

A veces, las circunstancias que se oponen al cambio son fortuitas y provienen del exterior, en otras ocasiones, esta oposición proviene de muy adentro de nosotros mismos. Nuestro subconsciente se resiste a abandonar determinada conducta, pues la considera de lo más natural y, por otra parte, cuando ocurre algo que no va de acuerdo con ella, nos hace sentir inconformes, nerviosos e

 

intranquilos. Una vez que se reconoce este hecho, se está preparado para enfrentar el cambio. Aunque se haya establecido que los patrones de conducta pueden hacer que se requiera de un gran esfuerzo para deshacerse de ellos, esto no significa que debamos conformarnos con seguir sometidos toda la vida a soportar sus consecuencias.

Hay que tomar una actitud siempre positiva para poder lograr cambiar nuestros hábitos, otra forma de ayudarse en la búsqueda de evitar viejos patrones de conducta indeseables, es la convivencia con personas entusiastas y positivas que miran la vida desde otro punto de vista.

 

Si reconocemos que en nosotros siempre existe la posibilidad de rediseñar nuestras conductas para convertirnos en personas que realmente deseamos, entonces, vale la pena hacer un esfuerzo adicional para poder lograr nuestro objetivo.

 

“Es muy fácil ser feliz” – Editorial Época.

(Visited 3 times, 1 visits today)

Etiquetas