Marcelo Fabián Scrimaglia, que mañana estará cumpliendo 48 años, es un atleta de fondo que viene de realizar una buena actuación en una competencia de 15K en Buenos Aires y que se entrena día a día para continuar mejorando.
Es un amante del deporte como muchos en nuestra provincia, pero él sobre sale por los demás y no lo hace por sus grandes resultados, sino por la feroz lucha que enfrenta minuto a minuto ante una enfermedad tan dolorosa y paralizante, como letal.
A Marcelo le detectaron hace unos 5 años «Esclerosis Múltiple”, una enfermedad que ataca el sistema nervioso central, lo deteriora y provoca, entre otros síntomas, problemas neuronales y una parálisis progresiva que lleva a la invalidez. Lamentablemente, aún no se encontró una cura y hasta se desconocen las causas concretas que la generan.
Marcelo, quien hasta hace dos años vivió en Tucumán, se encontró de golpe con un mal que amenaza su vida, comenzó a sufrir sus síntomas los que lo llevaron a caer en una depresión. Prácticamente postrado, sin poder ni correr 5mts., él y su mujer, Silvia Barrientos, pediatra nacida en Catamarca, decidieron trasladarse a nuestra provincia en busca de la contención que solo acá podían encontrar.
Ya estando en Catamarca, Marcelo, quien siempre jugó al basquet, conoció al reconocido profesor de Educación Física Dimas García, quien comenzó a entrenarlo y motivarlo para que luche contra su enfermedad.
Impedido de realizar una disciplina de contacto como puede ser el basquet, García le recomendó iniciar en el atletismo y desde ahí su vida cambió.
Pasaron cerca de dos años desde ese momento y hoy Marcelo es capaz de correr 15 kilómetros, como lo hizo días atrás en Buenos Aires, donde participó de la prueba «Tus 15K ALCEM”, organizada por la Asociación de la Lucha Contra la Esclerosis Múltiple (ALCEM), la cual completó con éxito y cumplió un sueño inspirador y superador.
Este crecimiento le permite a Marcelo plantearse nuevos y ambiciosos objetivos, como es el manifestado en su visita a diario El Ancasti, donde señaló que quiere «llegar al Iron Man de Brasil 2018”.
Pero más allá de estos objetivos, que se pueden cumplir o no, el ejemplo de Marcelo está en su lucha diaria, muchas veces frustrante, pero que lo mantiene firme en su anhelo de seguir. «Yo en Catamarca encontré el cariño de la gente, la ayuda de una persona como Dimas García y de todos los catamarqueños que me apoyan y me empujan a salir adelante, el amor de mi mujer y mis amigos que me acompañan a entrenar, son los fundamentos, además de mis deseos de vivir, que me llevan a seguir batallando”, contó entre lágrimas.
