Las Fuerzas de Defensa de Israel incorporaron a 22 personas en condición de autismo a trabajos de inteligencia militar.
Los miembros de la unidad 9900 están dedicados a descifrar imágenes aéreas tomadas de países considerados enemigos para identificar información que pueda ayudar en las misiones militares. Además, son los responsables de monitorear constantemente las ubicaciones de objetivos militares.
Esta iniciativa es parte del proyecto Roim Rachok, una frase en hebreo que significa “mirar más allá del horizonte”.
El plan surgió hace dos años a raíz de la muerte del amigo de un alto mando cuyo hijo es autista, pues el Ejército conoció las dificultades de las personas en esta condición para integrarse a la sociedad.
Entre sus labores está la vigilancia de la Operación Margen Protector contra la Franja de Gaza el año pasado, de acuerdo con un reporte de la agencia Europa Press.
Los soldados que se encuentran en esta condición han desarrollado con éxito el proyecto, por lo que ya colaboran con otras unidades del Cuerpo de Inteligencia de Tel Aviv.
De acuerdo con el Ejército de ese país, las personas dentro del espectro del autismo poseen mejores capacidades para desempeñar las tareas asignadas por la milicia, pues cuentan con mayor capacidad de concentración, son perfeccionistas y prestan mayor atención a los detalles.
Las personas que están en esta condición tienene una mayor capacidad perceptiva y pueden procesar mayor información, afirman expertos en neurociencia.
“Las personas que tienen una mayor capacidad perceptual pueden procesar más información de una escena aunque eso también incluiría algo de información irrelevante que quizá encuentre difícil de ignorar”, dijo Nilli Lavieel profesor del Instituto de Neurociencia Cognitiva de la Universidad de Londres.
Además, la capacidad de percepción en situaciones altamente desafiantes es mayor, de acuerdo con el experto.
A partir de estos hallazgos, expertos afirmaron que es posible una mayor integración social de las personas con autismo debido a su destacada capacidad para ver los detalles. Con esto, los tratamientos actuales buscan potenciar estas capacidades para integrar a las personas a la vida laborar en tareas concretas.
Lo cual tiene una ventaja para trabajar con tecnologías de información, pues las personas procesan los datos con mayor velocidad.
El soldado A, de 19 años de edad, es uno de los integrantes de la unidad 9900.
El joven declaró que al laborar en la unidad “siente que contribuye al Estado”. “Estoy muy contento en mi unidad y feliz con mi trabajo. Al principio pensé que me resultaría muy difícil hacer amigos, ya que soy una persona a la que le lleva mucho tiempo abrirse”, relató el joven.
Agregó que se sintió motivado con la idea de contribuir en ejercicios militares y detalló que se enteró por el programa por personal de su escuela.
“He cambiado mucho desde que llegué, mejoré como persona gracias a este proyecto. Mis comandantes siempre me dan el apoyo que necesito, además, el personal médico también me da un gran apoyo”, declaró.
“Aquí he encontrado algo que me interesa. Cuando estoy trabajando pienso que la vida de alguien depende de mí”, afirmó.
En el país de Medio Oriente, es obligatorio realizar 36 meses de servicio militar obligatorio en el caso de los hombres, mientras que las mujeres deben cubrir este requisito por 24 meses.
La ley de reclutamiento aplica para todos los ciudadanos de la nación, para quienes posean doble nacionalidad o residencia permanente. Incluso los cristianos y musulmanes pueden alistarse como voluntarios.
