Una de las problemáticas más destacables en el uso de los lectores de pantalla, no está en los softwares mismos, sino en que los contenidos de los sitios Web.
Acceder a sitios Web es algo común para muchos de nosotros, especialmente para las generaciones de personas denominadas como “nativos digitales”. De forma inconsciente y automática utilizamos variadas habilidades y sentidos para navegar por Internet, siendo uno de los sentidos más relevantes para dichos fines el de la visión. Cabe preguntarse entonces, ¿cómo lo hacen las personas con Discapacidad Visual para poder hacer uso de los servicios Web?
Por una parte, las personas con Discapacidad Visual pueden utilizar unos softwares especiales que convierten los textos en voz sintetizada, para que los contenidos Web sean audibles. Estos softwares son conocidos como lectores de pantalla. Por supuesto, sería tal vez poco eficiente si un lector de pantalla traduce a audio todos los textos que aparecen en un sitio de Internet, por lo cual estos softwares tienen diversas opciones, para hacer más amable la navegación. Por supuesto, se requiere cierta práctica en algunos casos para poder aprovechar las opciones de los lectores de pantalla.
Foto: LUN
Uno de los más conocidos es JAWS, el cual es el más utilizado en Chile, sin embargo, no es gratuito. Otros lectores de pantalla comunes son Home Page Reader y Window Eyes.
Problemas en sitios web
Una de las problemáticas más destacables en el uso de los lectores de pantalla, no está en los softwares mismos, sino en que los contenidos de los sitios Web deben ser accesibles a éste tipo de programas, por lo que se hace sumamente importante que los desarrolladores y programadores tengan en cuenta este punto, y por tanto conozcan del funcionamiento de los lectores de pantalla.
Ahora bien, el poder usar lectores de pantalla depende de los teclados, por lo cual estos también cobran importancia para el acceso de las personas con discapacidad visual a Internet. Así, nuevamente los programadores y desarrolladores deben ser cautos, pues en muchas ocasiones hacen que sus sitios sean prácticamente accesibles solo con el mouse.
Como conclusión, vemos que si bien la accesibilidad de las personas con discapacidad visual a la Web es factible, que existen formas de navegar por Internet gracias a ciertas asistencias tecnológicas especializadas, de todas maneras aparecen variadas barreras que terminan por negar el acceso a sitios Web por parte de personas con discapacidad visual. Probablemente esto sucede por factores económicos, por el desconocimiento de las necesidades tecnológicas y digitales de esta población específica, o por la invisibilización de estas personas, priorizando la creación para las mayorías.
