Rodrigo Pineda es un niño de cinco años que no le gusta convivir con otras personas; no es hostil y mucho menos “mimado”, pero padece Síndrome de Asperger, uno de los niveles más bajos de autismo que lo hace tener una conducta introvertida y poseer una memoria privilegiada.
“Mi hijo es muy inteligente. Ya sabía leer, escribir y multiplicar antes de entrar al kínder. Si fuera por él pasaría todo el día haciendo tarea, es por eso que priorizamos el juego antes que la escuela”, comenta José Luis Pineda, padre de Rodrigo, mientras observa a su hijo ir de un lado a otro en el sube y baja que se encuentra en el jardín del Centro Integral de Salud Mental (CISAME), donde acuden cada dos semanas a tomar terapia.
Para Alejandra Barbosa, quien cuenta con un doctorado en musicoterapia y atiende a niños con discapacidades intelectuales desde hace diez años, el autismo es un trastorno del desarrollo en el cual existen distintos grados y características.
En mayo pasado la Secretaría de Salud a nivel Federal publicó los resultados de un estudio en el cual se muestra que en México hay más de 390 mil casos de menores entre cero y 19 años con autismo. Rodrigo Pineda es uno de ellos.
“Se dieron cuenta en la escuela que tenía autismo por su actitud”, reconoció Luis, quien cuenta con otro hijo autista.
En ambos casos los especialistas han tratado de buscar los patrones que pudieron haber ocasionado el trastorno de sus dos hijos, por ejemplo han investigado si los niños tuvieron problemas al nacer.
“Mis hijos tuvieron problemas de nacimiento, mi primer hijo, Javier, nació de ocho meses, porque en un momento en el ultrasonido notaron que no se escuchaban sus latidos y se tuvo que adelantar el parto del bebé porque se estaba ahorcando con el cordón umbilical; el segundo, Rodrigo, bebió líquido amniótico”, recordó.
Los tipos de autismo
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), se estima que la incidencia del autismo a nivel mundial es de 1/160, y que existen, además del Síndrome de Asperger, dos tipos más de autismo: Autismo de Kanner y Síndrome de Rett.
En el autismo de Kanner, los niños que lo padecen tienen alteraciones en sus aptitudes de interacción social y comunicación y un número limitado de actividades, el lenguaje o la ausencia total del mismo, el nulo contacto visual y el aislamiento son sus rasgos más comunes. Mientras que el Síndrome de Rett, se presenta casi exclusivamente en niñas y aparece después de un periodo de aparente normalidad.
Romina Aguilar, enfermera y terapeuta para niños con autismo en el CISAME, habla de su experiencia y reconoce que hace 25 años cuando recién empezó a trabajar con niños autistas fue un impacto muy fuerte.
“Como enfermera tú das medicamentos y ya, ves irse a los pacientes, pero con mis niños, con ellos empiezo a ver que siempre van a necesitar de apoyo, necesitan saber que alguien está haciendo algo por ellos; no es lo que tú das, es lo que ellos te dan a ti”, comenta.
¿Cómo detectarlo?
En una reciente conferencia impartida en el Centro Autismo Teletón (CAT), la psicóloga y neuróloga Gabriela Foule dijo que cuando se trata de identificar y tratar el autismo los padres deben poner mucha atención en el comportamiento de sus hijos, ya que una adecuada detención temprana puede arrojar mejores resultados en la terapia antes de los cuatro años de edad.
La especialista dijo cuáles son los síntomas que se deben tomar en cuenta: Si el niño no habla, no avisa para ir al baño o se golpea constantemente la cabeza u otra parte del cuerpo, entre otros aspectos, no se debe pensar que es porque está chiquito o es malcriado porque se estaría fomentando que el trastorno avanzara sin ningún impedimento.
Es por eso que cuando el niño o la niña presentan algunos de estos síntomas, es recomendable llevarlo con un neurólogo pediatra, que es quien puede dar una primera aproximación médica en torno a si hay alguna alteración o no.
De igual forma, si el niño presenta retraso o falta del lenguaje verbal o expresa ocasionalmente una palabra, confunde los pronombres y se refiere a sí mismo en tercera persona, es necesario hacer una valoración médica.
La detección temprana es una prueba que, en 15 minutos, permite darse cuenta sobre alteraciones motrices, del lenguaje, adaptación social y cognitivas.
En el caso de Rodrigo y su hermano Javier gracias a que su padre hizo caso a los focos rojos en las conductas de sus hijos y por supuesto, ha dado un correcto seguimiento a sus terapias, los pequeños han manifestado un avance en cuanto a su relación con los demás, y sobre todo han demostrado que tener autismo no es una limitante para tener una vida digna.
Estas son algunas de las instituciones a las que se puede acudir para obtener tratamiento y/o diagnóstico:
· Clínica Mexicana de Autismo
Calle Van Dyck 66, Colonia Mixcoac Nonoalco, Delegación Benito Juarez
Teléfono: 5611-8541 // 5615-0615
· Centro de Autismo Teletón
Calle Marte 3, Valle de Anahuac, 55210 Ecatepec de Morelos
Teléfono: 5699 2122
· CISAME
Periférico Sur 2905, La Magdalena Contreras, San Jeronimo Lidice, 10200 Ciudad de Mexico
55 5377 2701
