Hasta la fecha el autismo sigue siendo un tema tabú para muchas personas, y, aunque cada vez se identifican más pacientes de este trastorno, muchísimos de los casos no se detectan, o bien, lo hacen de manera tardía. Por eso, para lograr identificarlo y tratarlo de manera oportuna, te decimos las señales que los padres deben conocer para saber si su hijo padece autismo.
Y es que, el Trastorno de Espectro Autista, o mejor conocido como Autismo, aparece regularmente durante los primeros años de vida, y es muy importante diagnosticarlo lo más pronto posible, para brindar al niño un tratamiento oportuno que le garantice un correcto desarrollo a largo plazo.
A través de uno de los videos que una pareja con 3 hijos diagnosticados con autismo publica en su canal de YouTube, Autism Family, con el fin de dar información valiosa para otros padres que vivan una situación similar; se dieron a conocer 11 señales que cualquier padre debe saber para ver si su hijo padece autismo.
Autismo
Cabe destacar que, aunque un niño tenga estos síntomas, no significa que necesariamente sea autista, pero sí es importante acudir inmediatamente con un especialista que pueda confirmar o descartar las sospechas.
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Aplaudir
Aunque la mayor parte de los niños aplauden durante los primeros años de su vida, después de los 3 años es algo que los pequeños con autismo siguen realizando con recurrencia, ya que representa una forma de autoestimulación, cuando hay demasiada estimulación en el ambiente, ya que ellos son bastante sensibles, y tienden a enfocarse en una sola sensación.
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Golpearse en la cabeza
Los niños con autismo tienden a realizar este hábito como parte de la autoestimulación, que suele ser perjudicial, por lo que es importante distraer a los niños de algún otro estímulo y evitar que se golpee.
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Berrinches sin sentido
Todos los niños hacen berrinches, inclusive en público. Sin embargo, la diferencia de los niños con autismo es que suelen hacerlos sin motivo alguno. Si los niños no paran de llorar y hacer berrinche aunque se les de lo que desean, es una señal para prestar atención.
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No te contestan
Otra clara señal de que un niño padece autismo es que cuando les hablas no te contestan. Los padres suelen pensar que se debe a algún problema de audición, sin embargo, puede ser una señal de autismo, cuando están distraídos o retraídos.
Las personas con autismo se caracterizan por ser muy sensibles a los ruidos, pues perciben los estímulos de este tipo con mayor intensidad que los demás.
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Agresividad extrema
Todos los niños discuten y se pelean con otros niños o con sus padres cuando algo les molesta. Paro los niños con autismo suelen hacer lo mismo, pero aparentan que lo disfrutan. Según la organización Raising Children, los niños autistas atacan o tienen comportamientos agresivos con adultos o niños por motivos como los siguientes:
No pueden comunicar sus deseos o necesidades, no entienden lo que sucede a su alrededor, tienen mucha tensión o ansiedad, buscan escapar de situaciones estresantes, tienden a autoestimularse por una sobrecarga de emociones.
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Se obsesionan con objetos
Algunos niños con autismo tienden a obsesionarse con algo, como verter líquidos de una taza a otra, jugar con líquidos, entre otras cosas.
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Evita el contacto visual
Otra de las señales más notorias en los pacientes de este trastorno es que suelen evitar tener contacto visual con alguien, sea cual sea la edad.
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Caminar con la punta de los pies
También, los pacientes autistas tienen una particular forma de caminar habitualmente: con la punta de sus pies. Lo hacen jugando, pero es importante estarlo monitoreando para ver si repite este hábito, pues quizás quiere decir que tiene autismo.
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Falta de comunicación o lenguaje
Cuando un niño tiene más de tres años y utiliza pocas palabras o ninguna, es una señal de que puede padecer autismo. Aunque no siempre se puede traducir en eso, sí es común, y debe de ser analizado por un especialista para determinarlo.
Asimismo, en muchas ocasiones suelen repetir constantemente la misma palabra o frase, de manera obsesiva, que también debe checarse.
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Se irritan ante pequeños cambios
Los niños autistas suelen estresarse cuando sucede algún cambio en sus vidas, por más pequeño que este sea, lo que los lleva a irritarse, molestarse y demostrar ansiedad.
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No responde a su nombre
Cuando un niño no reacciona cuando se le llama por su nombre después de los 12 meses o después, puede deberse a un problema de autismo.
