Continuando en Todos Somos Uno en nuestra introducción a los principales valores que tenemos que permear con nuestros seres queridos, existe un valor que es muy importante, este es el de la cooperación, siempre he comentado que un niño que es atento y que coopera es bien recibido en cualquier lugar, por eso hay que fomentarles desde pequeños este valor, siempre estamos con el pendiente de que va a suceder con nuestros seres queridos cuando nosotros faltemos, pues para que tengamos una tranquilidad, hay que fomentar en ellos el valor de la cooperación, si por alguna circunstancia del destino nuestro ser querido tuviera que cambiar de domicilio ya sea para estudiar, trabajar o se vuelve independiente, lo mejor será que tenga en claro que todos tenemos que participar en los roles y actividades comunes para mantener un espacio en orden y limpio, o no solo en cuestiones del hogar, la cooperación en el ámbito laboral hace que la persona sobre salga por su iniciativa a ayudar a que las cosas resulten, es para todos bien visto un colaborador o un familiar que siempre está dispuesto a participar en las actividades que se requieran.
La cooperación es la combinación de nuestros esfuerzos con los esfuerzos de los demás para lograr una meta en común. Es un valor imprescindible, pues con esto estamos ayudando a conseguir un bien o realizar alguna actividad con mayor rapidez.
Lo más importante de la cooperación es la experiencia de relacionarnos con otros, retroalimentarnos y a veces compartir momentos importantes.
Se dice que la antítesis de la cooperación es la competición, pues en esta última se tiene como objetivo ganar algo de manera individual. Sin embargo, la competición puede darse entre grupos de personas que cooperan, por ejemplo en el futbol.
Piense que la fundación de las grandes ciudades y naciones fueron y seguirán siendo un producto de la cooperación. Por ejemplo: en la edificación de una casa participa un arquitecto, que es quien diseña el plano que los albañiles van a seguir; después siguen los decoradores o a la misma familia que pinta la casa a su gusto, es decir, varias personas participan en esto y el resultado es bueno.
Todas las sociedades están basadas en el principio de cooperación. En nuestro país, por ejemplo, cooperamos con nuestros impuestos para que los niños tengan educación gratuita, para que se contribuyan carreteras y hospitales.
Referencia: JOSE DANIEL R. GORDILLO- GUIA PARA ENSEÑAR VALORES A LOS NIÑOS – Editorial Época
