Mamá “grandecita”
Yo me convertí en mamá a los 37 años, digamos que ya estaba bastante “grandecita”. Trabajé, viajé y disfruté bastante de mi vida sin hijos.
Y cuando llegó Ana Gaby, ella era la nieta más esperada, la hija más esperada. En fin, era el centro de atención de todos. Estábamos todos pendientes de lo que quería, necesitaba y en consentirla un montón.
Y el segundo, ¿pa’ cuándo?
Siempre dijimos que no nos queríamos quedar con una sola bebé, así que la idea del segundo no se hizo esperar. Nunca fue que nos sentamos a pensar cuándo íbamos a programar el segundo bebé, pero comprenderán que tampoco era que tenía mucho tiempo.
Ya estaba rayando los 40 (o bueno, como yo digo, ¡en los 30 del lado de allá!) Así que, entre una cosa y otra y entre que todavía estás aturdida del primer parto quedé embarazada de Isabella cuando Ana Gaby tenía 9 meses. ¡Oh sí! Todavía estaba acostumbrándome a todo este revulú y ya iba a repetir todo de nuevo.
Ana Gaby… ¡viene el verguero! (Versión 2.0)
Obviamente, Ana Gaby a sus 9 meses ni cuenta se iba a dar que yo estaba embarazada. Pero, ya cuando la barriga se me notaba le empezamos a decir que mamá iba a tener otro bebé y que iba a ser su hermanito o hermanita. Yo creo la verdad no creo que ella entendía mucho así que según yo la transición iba a ser fácil. O al menos, eso era lo creía.
Llego el día del “gender reveal” y ese día nos reunimos todos, felices y emocionados de lo que vendría. Y, cuando descubrimos que era niña, todos celebramos, menos Ana Gaby. ¡La chiquilla era llorar y llorar! Yo no sé si lloraba porque estaba triste, porque estaba aturdida de la gritería o porque dejamos ir a los globos rosados.
¡Llegó Isabella!
Desde ese momento, ya nos referíamos a la bebe por su nombre: Isabella. Ana Gaby todavía no hablaba mucho así que ella solo señalaba la panza cuando le preguntaban por su hermana. Llegó el momento y nació Isabella. Ana Gaby la fue a visitar al día siguiente, y fue un momento algo impactante para ella.
Primero, por verme en el hospital. Recuerdo que me preguntaba qué era la venoclisis. Y segundo, ¡ver a Isabella por primera vez! Cuando llegó el momento de conocer a la hermana, le dijimos que ella era su bebé y que siempre iban a jugar juntas.
Creo que Ana Gaby tomó literal lo de que Isabella era su bebé porque hasta el día de hoy ella dice que Isabella es su bebé. La verdad es que creo que el hecho de que ella estuviera tan pequeña hizo todo más fácil, Ana Gaby recibió a su hermana literal como si fuera de ella y ni tuvimos esos celos que a veces se da entre hermanos.
Yo la fui incorporando en las tareas de Isabella, y ella era parte de las rutinas. Por supuesto, aprendí a dividirme entre ambas porque aunque estaban en etapas distintas seguían siendo dos bebes en casa. Creo que ahora es más fácil porque van, como quien dice, “una detrás de otra”.
Algunos tips para tener #TodoBajoControl
Eso sí, siento que tengo 4 años de cansancio acumulado porque el verguero 2.0 ha sido toda una aventura. A todas estas mamás que van a tener otro bebé les puedo dar los siguientes tips:
1. No se estresen pensando en cómo serán capaz de amar a otro bebé de la misma forma. ¡Les prometo que el amor se duplica!
2. Procuren incluir al hermano mayor en las rutinas del nuevo bebé incluso antes que nazca
3. Reserven algún tiempo o actividad especial para compartir solo con el hermano mayor
4. No se estresen, ¡todo va a estar bien! Si ya lo hicieron una vez, esta segunda les irá mejor. Y si no, pues que bueno que nos tenemos las unas a las otras para recordarnos de tener #TodoBajoControl
