Por un lado porque es un proyecto personal, la consecución en papel y tinta de un sueño nacido del amor por sus hijos de una madre reciente de inteligencia emocional y despierta, una de esas personas que nacen buscando diferentes maneras de ayudar al otro en lo que esté a su alcance. Sé bien de lo que hablo, tengo la suerte de conocer a María José Rodríguez personalmente.
Tiene también valor por la calidad de este cuento autoeditado. Tanto la historia como las ilustraciones, de Clara Luna, son una delicia con un acabado que nada tiene que envidiar a los libros infantiles de las mejores editoriales.
A Julia, que a sus seis años ya empieza a ver cómo muchos de estos cuentos se le quedan pequeños y con ojo muy crítico, le gustó mucho. Además de entretenerla cogió perfectamente la idea que trasmite.
Y en esa idea subyace la gran cualidad de este cuento: tenemos que querernos y aceptarnos tal y cómo somos. No tiene sentido odiar nuestras múltiples pecas, nuestro pelo ensortijado, nuestra nariz grande o nuestros ojitos pequeños. No tiene sentido porque supone odiarnos a nosotros mismos. Y no tiene sentido, además, porque nos rodean otros que nos amarán igual, con todas esas perfectas imperfecciones.
Chiquitina nació hace casi cuatro años y sigue gozando de buena salud. Cuando nació lo hizo con el siguiente deseo:
Ayudar a los que como ella tienen un problema que a otros puede parecer pequeño, pero a los pequeños les puede parecer grande;
Arrancar una sonrisa de esas que nos gusta tanto ver en la cara de nuestros niños;
Ser una bonita excusa para establecer un diálogo entre padres e hijos;
Y ser una estupenda oportunidad para decirles a nuestros niños que les queremos
¿Cómo comprar Chiquitina? Pues enviando un mail a aldakaleundome@gmail.com con el título: “Quiero a Chiquitina” y esperando instrucciones de pago. Cuesta 15 euros, más los gastos de envío. También podéis consultar en su web un listado de librerías en las que está disponible y las actividades de cuentacuentos que María José organiza, no limitándose únicamente a leer, sino haciendo participar a los niños, que dibujan y aprenden a reconocerse y a quererse (los profes que me leáis, que sepáis que podéis organizarlo con ella).
Y el 20% del precio de venta irá destinado a una ONG o a una protectora de animales a vuestra elección si así lo deseáis. Un cuarto y último motivo por el que Chiquitina es un cuento que vale mucho más de lo que cuesta.
Por cierto, he podido ver un poco del nuevo cuento que María José está preparando, en el que ella también está elaborando las ilustraciones, y me tiene fascinada. Es una belleza. Estoy deseando que pueda encontrar el tiempo suficiente para terminarlo prono.
