Todas las personas somos diferentes y reaccionamos de manera distinta cuando nos enojamos, algunas suelen aislarse por completo, otras suelen azotar cosas, llorar, gritar, golpear incluso comer. No es fácil controlar las emociones ante una situación la cual provoca un enfado o molestia, sin embargo, debemos aprender a hacerlo para evitar perjudicar nuestra salud.

• Un estudio realizado por la Universidad de Yale, reveló que las personas que se enojan generan estrés, por ello suelen subir de peso. Cuando el cuerpo libera cortisol, este incrementa el nivel de azúcar en el organismo y así de sencillo «engordamos», sin necesidad de comer nada.
• La función del cuerpo humano es maravilloso, los especialistas también han encontrado que cuando las personas suelen enojarse el organismo libera adrenalina y cortisol, incluso, aumenta el nivel de insulina, todo en conjunto puede provocar que las personas tengan la sensación de tener hambre y por consecuencia suben de peso.

• Enojarse menos

• Algunas personas suelen comer más de lo normal cuando están enojados, siente ansiedad de alimentarse para calmar su frustración. Lo más común es comer aquellos alimentos que contienen sal, grasa y azúcar como por ejemplo: pan, dulces, chocolates, que son alimentos que contienen triptófano, feniletilamina y anandamina que son los que regulan los niveles de serotonina «la hormona de la felicidad», responsables del amor y tranquilidad.

• ¡No te enojes!

• El autor del libro «El que se enoja engorda», Juan Manuel Romero Villa, explica que al enojarse el cuerpo libera las hormonas mencionadas anteriormente, provocando que se inflame, porque las células no pueden liberar energía y por consecuencia se sube de peso. Pero eso no es todo, también afecta nuestro estado de ánimo, nos sentimos cansados y fatigados.

• Otras consecuencias

• En el caso de los hombres cuando se enojan suelen aumentar su musculatura en brazos y papada, en las mujeres afecta la cintura y el abdomen. También aparece el terrible acné´, se reseca la piel, aparece vello facial y se tiene la sensación de hinchazón en todo el cuerpo.

• Incluso provoca un envejecimiento prematuro debido a que deteriora el corazón y los pulmones, se corre el riesgo a desencadenar enfermedades cardiovasculares, puesto que al enojarse se acelera el corazón, deteriorando las paredes de las arterias y acumulando grasa.
• Según lo publicado en American Psychological Association, aprender a controlar las emociones es indispensable para mantener una excelente salud. Por ello te comparto estas sencillas técnicas:

• 1. Relajación

• Respirar profundamente, puede ayudar a calmar los sentimientos de enojo. Respira desde tu pecho, inhala y exhala lentamente hasta lograr tranquilizarse. Visualiza una experiencia agradable y trata de no pensar en tu frustración o enfado, observaras que tus músculos dejarán de estar tensionados.

• 2. Cambia tu forma de pensar

• Es común que las personas cuando nos enojamos solemos maldecir, insultar, gritar etcétera, la idea es modificar esos pensamientos por otros más razonables, venciendo la ira, para encontrar solución a los problemas.

• 3. Comunicación

• Después de tranquilizarte, deberás buscar el dialogo, muchas veces no escuchamos las razones cuando estamos enojados, por lo tanto, es recomendable dejar que la persona logre expresar sus sentimientos, ideas y opiniones, así será más probable solucionar las cosas.

• 4. Cambia tu entorno

• Salir a pasear después de estar enojados es una manera de tranquilizarse y reflexionar. Algunas veces el entorno nos causa irritación y furia.
• Entre más evites enojarte, te mantendrás en mejores condiciones de salud, recuerda que siempre encontraras una solución a tus problemas.

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