Lo que aprendí de mis tristes navidades

Durante mi infancia la navidad era una época que esperaba con mucha ansiedad, no me mal intérpretes, ésta época del año, me encantan ver la casa iluminada con cientos de luces multicolores, las novenas de aguinaldos, los adornos típicos, el olor a comida exquisita típica de la temporada y sin duda la llegada de regalos de parte de los familiares; sin embargo, por alguna razón al crecer perdí ese sentido que para mí tenía la navidad, de verdad que lo extraño.

Quizás se deba a que por una muy larga temporada mi madre, hermana y yo pasamos de manera repentina a estar muy solas, sumidas en añoranzas de antaño, con grandes dificultades económicas.

Si, la navidad había dejado de ser lo que era y no por falta de adornos o comida porque pobres y todo nos apañábamos con lo que teníamos, sin embargo, era triste que llegara la noche buena y que estuviéramos tan solas viendo a tantas familias reunidas por multitudes, nosotras nos sentíamos olvidadas y tristes.

Muchos años fueron los que pasaron de esa manera, pese a eso, el ser humanos se adapta a la situaciones y aunque no ha cambiado mucho nuestra condición de so9lo tenernos a nosotras, debo decir que hemos aprendido a vivir esta época por lo que es y no por lo que antes representaba.

  • Lo que aprendí de mis tristes navidades

    Lo más importante que aprendí es que lo material pierde valor ante lo espiritual. Te pueden obsequiar mil cosas muy costosas o no tanto, así vale más QUIEN TE LO DA, el esfuerzo y afecto con lo que te lo obsequia, que lo que te dan.

  • La familia lo es todo

    . No importa que tantos adornos hayan en casa, o la cantidad exorbitante de comida, vale mucho más el que tu familia, por pequeña que sea, esté reunida, y no importa que te dejen la casa hecha un lio de platos, vasos, confeti y serpentinas, lo que más aprendes a valorar es que ESTÁN ahí para ti y tú para ellos.

  • El pasado fue bueno, pero el presente es mejor y el futuro prometedor

    Puede ser que extrañes tu infancia colmada de juguetes, visitas a las casas de los vecinos a cantar los villancicos y rezar las novenas y mil cosas más, pero el pasado no regresará por más que lo anheles.

  • Debes disfrutar el ahora

    , con los tuyos, amarlos y disfrutar con ellos de lo que vives ahora, porque no sabes si podrás vivir una nueva época navideña de nuevo en su compañía, puede que sí o no, el futuro es algo que construyes pero que no sabes a ciencia cierta si podrás vivirlo como esperabas.

  • Debes estar dispuesto a hacer el bien

    Se te van a presentar mil oportunidades para demostrar de qué material estás hecho y lo justo es que des un poco de lo que has recibido a lo largo del año (o de tu vida, por qué no) Se generoso todo lo que puedas y no me refiero a solo dar cosas, si no a servir a quien sea que lo requiera, pequeños gestos valdrán mucho la pena y le darán un nuevo significado a la palabra compartir.

    La navidad cuando te vuelves adulto cambia por completo su valor, aun así no tiene porqué ser triste para nada. Espero que junto a los tuyos pases unas muy hermosas festividades y que el deseo de dar amor y servir ronde en tu hogar junto a tus seres amados.

     

 

 

Original.

(Visited 3 times, 2 visits today)

Etiquetas ,