Jonathan Bryan es británico y tiene 10 años. Nació con parálisis cerebral después de que su madre, Chantal, tuviera un accidente de coche cuando estaba embarazada. No puede hablar ni caminar, tiene problemas de riñón, necesita diálisis, y depende de una botella de oxígeno. Además , a su familia le dijeron que tenía “profundos y múltiples problemas de aprendizaje”.
En poco más de un año, Jonathan pasó de no hablar nada a decir lo que le apetecía gracias a sus tablas de ortografía. Ahora puede escribir poemas e historias complejas en su blog, informa Daily Mirror.
Joanathan utiliza tres tablas –para letras, números y puntuación- situadas enfrente de él, de manera que puede hacer la selección con los ojos.
Ahora lee como un niño de su edad y está usando su nueva voz para hacer campaña por una mejor educación para los jóvenes con discapacidad. Jonathan ha escrito una elocuente carta a la ministra de Educación británica, Nicky Morgan, para pedir más ayuda en las escuelas para los niños que no pueden hablar.
Con su tabla de deletreo, Jonathan dice que “si más gente hubiera creído en mí, yo podría haber aprendido a leer y escribir al mismo tiempo que mis compañeros en una clase normal”. Y añade: “Lo que me da una pena increíble es ver a mis amigos que no pueden hablar en sus sillas de ruedas perderse la plenitud de la vida porque nadie cree que merezca la pena alfabetizarles”.
“Están esperando a que alguien les de una oportunidad para tener una voz. Antes, me sentía como un pájaro en una jaula. Ahora es genial. Me encanta ser capaz de decirle a mi familia y amigos que les quiero. Es una gran diferencia para mí ser capaz de decir lo que quiero. Mi sueño es que cada niño como yo pueda aprender a leer y escribir y deletrear usando el mejor método para ellos”.