Dos padres de niños con autismo protagonizan una carrera de Jaén a Córdoba para romper con los tópicos ylos prejuicios
Cumplir un reto deportivo y solidario para concienciar y sensibilizar sobre el autismo y los mitos que envuelven a este trastorno. Con este objetivo, y bajo el lema 1, 2, 3, ya. Autismo sin mitos , dos padres de la asociación Autismo Córdoba y Autismo Jaén, Antonio Navarro y Ramón Marcos, acompañados de una decena de voluntarios y la atleta egabrense María Dolores Jiménez, han protagonizado este fin de semana una carrera de 123 kilómetros que partió el sábado desde tierras jiennenses y que concluyó ayer a las 12.00 horas en las instalaciones del colegio cordobés Santo Angel.
El presidente de Autismo Córdoba, Miguel Angel López, que también participó en la carrera en bicicleta, explicó que se trataba de llevar a cabo «una prueba extrema» para llamar la atención de la sociedad y así «lograr que la gente se anime a acercarse a nosotros, a conocer cómo son nuestros hijos y a romper con todos los mitos» y prejuicios. Y estos pasan, según explicó, por «utilizar la palabra autismo como peyorativa, creer que estos niños viven en una burbuja aislados, que no sienten, que les falta el lenguaje verbal… No hay dos niños con autismo iguales y queremos que la sociedad los trate como niños normales».
De su lado, el presidente de la asociación Abraza, Andrés Timoteo, leyó un manifiesto al concluir la carrera en el que animó a los padres a acabar con los mitos porque «son los responsables de que las personas con autismo sean señaladas, se les haga daño y sean vulnerables». «Nuestra responsabilidad –señaló– es hacer posible que nuestros niños formen parte de la sociedad y para ello tenemos que poner nuestra energía, primero, en educarlos y, segundo, en sensibilizar a los que nos rodean para mostrarles que son personas únicas y especiales y que se merecen todo el respeto como cualquier ser humano».
Antonio Navarro, uno de los dos corredores, que fueron recibidos por más de 200 familiares y amigos de niños y mayores con autismo, subrayó al llegar que «el esfuerzo ha merecido la pena» para «derribar falsos mitos» sobre este trastorno.
