Nuevo año, nuevas metas y propósitos, son los deseos que la mayoría de las personas queremos lograr. Siempre existe la disposición y las buenas intenciones de cambiar algunas cosas que no se realizaron en los años pasados, entre la más común es el perder peso.
Algunas personas comienzan por cambiar su estilo de vida para lograr su objetivo, comienzan a realizar ejercicio y cuidan de su alimentación, sin embargo existen algunos hábitos que aparentemente son saludables que en realidad impiden perder esos kilos demás.
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1. Saltarte comidas
Algunas veces el creer que no desayunar, comer o cenar, es ideal para bajar de peso, es un grave error. Lo ideal es realizar todas las comidas, con dos espacios entre el desayuno y la cena, logrando comer 5 veces al día. Recuerda que los alimentos deben ser saludables, comer frutas y verduras es una opción.
Saltarse un alimento provoca que el organismo produzca mayor cantidad de insulina, está es la responsable de que las células dispongan de glucosa para tener energía. Cuando más insulina genere el cuerpo, más necesidad tiene el organismo de consumir alimentos, haciendo que el apetito y la cantidad de ingesta aumente.
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2. Elegir comer en la calle
En realidad es delicioso comer en la calle, además que es práctico y no se invierte tiempo. Sin embargo, cuando tu meta es bajar de peso, debes evitar comer en cualquier lugar, ya que la mayoría de los restaurantes no cuidan la cantidad de grasa que le ponen a los alimentos, algunas veces son muy condimentadas y tienen mucha cantidad de sal.
Sí vas a gastar en comprar una ensalada, es mejor que la prepares en casa, te saldrá más económico y tendrás la seguridad que las verduras fueron desinfectadas.
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3. Comer muchas frutas
Las frutas son el primer alimento recomendado por los nutriólogos a realizar una dieta, sin embargo, muchas de ellas tienen gran contenido de calorías y azúcares, lo cual no te ayudará a perder peso. Deberás consultar los tipos de frutas que son benéficas para ayudarte con tu meta, por ejemplo: la papaya, el melón, las manzanas o fresas, no contienen mucha azúcar y son ligeras, en cambio los plátanos, el mango o ciruelas tienen muchas calorías.
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4. Tomar mucha agua o no tomar
Es recomendable tomar al día dos litros de agua, para liberar las toxinas y mantener el cuerpo hidratado. Cuando dejas de tomar agua hace que ganes peso, porque no habrá forma de eliminar las toxinas, además puedes cometer el error de sustituir el agua con otras bebidas poco saludables.
En lo contrario, algunas personas toman exceso de agua y creen que al hacerlo perderán peso, lo que hace es que te sientas satisfecho por un momento logrando consumir menos, sin embargo, puedes provocar tener otro tipo de afecciones como por ejemplo: alteras el funcionamiento de los riñones, sufrirás de calambres musculares, te sentirás cansado, algunas veces tendrás nauseas, dolor de cabeza, somnolencia, convulsiones, perdida de concentración incluso hasta puedes tener problemas cardiacos.
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5. Comer o beber alimentos «light»
Muchos de los alimentos y bebidas que son light, no te ayudarán a perder peso, algunos de ellos contienen menor contenido de calorías, sin embargo no dejan de tenerlas, por ello se deben consumir con moderación.
Algunas veces las personas confunden que por ser light comerán pocas calorías, pero cuando se suma al día todas las cantidades de productos ligth que se consumen, puede resultar que se ingiera mayor cantidad de calorías permitidas.
Ten cuidado con los alimentos que dicen «cero% grasa», claro que es real, pero pueden tener mucha azúcar o sal, haciendo que tu meta no se cumpla.
Muchas personas cometemos el error (me incluyó) de ponerse una dieta que bajan de internet, o que alguien se las recomendó, sin en realidad conocer cómo es el funcionamiento de nuestro organismo y dejando a un lado las actividades que se realizan al día. Sí deseas perder peso, es recomendable que visites a un especialista que te ayudará a conquistar tu meta, estableciéndote una dieta adecuada para tu estilo de vida y hábitos.
